La cardiopatía congénita es una afección que se caracteriza por alteraciones estructurales en el corazón del bebé, estos problemas de formación se originan durante su etapa de gestación.

El término cardiopatía congénita engloba diferentes problemas o grupo de enfermedades que afectan al corazón.

Actualmente no se ha encontrado una causa exacta que genere la presencia de la cardiopatía; sin embargo, el consumo de sustancias químicas, bebidas alcohólicas, fármacos, así como la diabetes gestacional en la mamá durante el embarazo, son considerados factores que incrementan la posibilidad de una cardiopatía congénita en el bebé.

¿Cómo saber si un bebé cuenta con algún tipo de cardiopatía congénita?

Durante el embarazo, es importante que la mamá acuda a sus consultas prenatales, donde el médico periódicamente realizará ultrasonidos o ecografías que ayudarán a detectar las posibles afecciones del bebé. Los tamizajes recomendados antes del nacimiento son las mejores herramientas.

En caso de detectar algún problema en el corazón del bebé, el médico programará la asistencia de un cardiólogo pediatra, un cirujano u otro especialista para cubrir la asistencia médica que requiera el recién nacido: en su llegada al exterior de su mamá.

El contar con esta asistencia médica en el nacimiento del bebé puede marcar una diferencia entre la vida o la muerte, ¡así de importantes y trascendentes son los primeros momentos para el recién nacido!

¿De qué manera debe ser tratada una cardiopatía congénita?

El tratamiento que requiere el bebé dependerá del tipo de cardiopatía. Algunas afecciones podrán ser asintomáticas o requerir cuidados y medicamentos muy particulares, que pueden variar en un lapso de tiempo breve o prolongado, mientras que otras veces se necesitarán procedimientos quirúrgicos.