Si tu bebé tiene entre 4 y 7 meses de edad está en un momento de su vida en el que puede comenzar a probar y descubrir nuevos y deliciosos sabores dentro su alimentación: ¡una gran experiencia para la vida!
Sin embargo, esta nueva práctica puede ser de inicio algo difícil y complicada para un bebé, teniendo en mente que sólo ha sido alimentado con leche materna o de fórmula.
Alrededor de los 6 meses de edad, un bebé requiere una alimentación enriquecida con hierro y zinc, así que, ¿de dónde puede obtener estos nutrientes? ¡De los alimentos sólidos!
Pero, ¿cómo saber si mi bebé está listo? Algunos puntos que debes considerar para la transición de su alimentación son:
Si tu hija o hijo pesa el doble de cuando nació; es decir, alrededor de los 5.900 kilogramos.
En algunos casos, los bebés de 4 meses ya pueden iniciar una dieta con alimentos sólidos.
Si puede sentarse en su silla para bebé con buen control de su cabecita.
Si te mira cuando comes y tiene interés en comer lo que comes.
Parece ansiosa o ansioso por ser alimentado con tu comida.
Abre la boca cuando le acercas la cuchara.
La Academia Americana de Pediatría (AAP) sugiere que, una vez que son incluidos los alimentos sólidos, debes continuar dándole pecho a tu bebé hasta que mínimo, cumpla 12 meses desde su nacimiento.

¡Ahora sí! Cuando haya llegado el momento de alimentar a tu bebé con comida sólida, comienza por papillas elaboradas de un cereal enriquecido con hierro. Tu bebé nunca antes ha comido algo más espeso y de diferente textura, sólo la leche líquida, así que es probable que pase algún tiempo para que se acostumbre.
Para hacer más sencillo que coma sus primeros alimentos sólidos, mezcla su papilla con leche materna, fórmula o agua y, con una cucharita para bebés, acerca el alimento a su boca e intenta con pequeñas cantidades.
También puedes motivar a tu bebé diciéndole algo como: “Mmmm… ¡Qué rica comida!” o, “¿Ya viste que delicioso se ve esto?”. Sí, ¡anima a tu bebé a probar su nuevo alimento!
Un buen tip es, cuando llegue la hora de su alimentación, inicia con leche materna o fórmula para después darle su papilla. De esta manera, tu bebé no se sentirá frustrado si tiene mucha hambre.
¡Y recuerda algo muy importante!:
- No introducir ningún tipo de alimentos a su biberón, podría asfixiarse o ser sobre alimentado.
- Sus primeros alimentos deben estar cocidos.
- No des alimentos que deba masticar.
- No condimentes sus papillas, ni agregues sal.
- Si compras alimentos preparados y hechos puré, asegúrate que sean para bebés y no para adultos.
- No obligues a tu bebé a comer, cada pequeño tiene su propio ritmo.
Poco a poco sabrás en qué momento tu bebé puede tomar la cuchara y practicar su propia alimentación hasta sentirse satisfecho.
Una vez que coma de mejor manera las papillas, podrás incorporar verduras, legumbres, frutas, incluso proteínas como carne, todo esto en una textura de puré que pueda ingerir. Perooooo, cada que incluyas un nuevo alimento, deja pasar algunos días y observa si tu bebé tuvo alguna reacción alérgica.
Trata de que los horarios de alimentación de tu bebé coincidan con las comidas de la familia, existen estudios que demuestran que comer en familia tiene grandes efectos positivos en el desarrollo de los niños y niñas, ¡así que no lo dudes!
Y, no menos importante, recuerda consultar con tu médico todas las preguntas sobre la alimentación con sólidos para tu bebé.