La llegada de tu bebé involucrará ciertos cambios en el estilo de vida de cada integrante de la familia… ¡incluso para tus mascotas!
Sin embargo, actuando a tiempo y con antelación al nacimiento del bebé, podemos hacer de este proceso una experiencia positiva y agradable para todos.
Así que, para no morir en el intento, te dejamos algunas recomendaciones que, entre más pronto lleves a cabo, mejor será el resultado.
Antes del nacimiento de tu bebé
- Si ya cuentas con una habitación o un espacio dispuesto para tu hija o hijo, asegúrate de que sea un lugar tranquilo donde tú, tu bebé y tu mascota puedan sentirse a gusto.
- Invita a tu mascota a que camine y recorra el espacio del bebé, puede oler y observar los muebles y otros objetos, la idea es que se vaya familiarizando con todo lo nuevo que ocurre para la llegada del bebé.
- Procura hacer con antelación los cambios que requiera tu mascota en tu casa como: cambiar su cama, el arenero o el sitio donde guardas sus juguetes. Si lo haces con tiempo, tu mascota no sentirá cambios bruscos ni se sentirá desplazada.
- Poco a poco introduce y preséntale a tu mascota accesorios, olores y sonidos que puedan relacionar con el bebé. Si ya cuentas con algún jabón, toallitas húmedas o cremas especiales para tu bebé, puedes presentarlos a tu mascota para acercarlo al olor que tendrá tu hija o hijo.
- Un tip que recomiendan los expertos veterinarios es que, al presentarle a tu mascota un objeto con olor o sonido relacionado con tu bebé, enseguida le des un premio comestible para que lo asocie de manera positiva.
- ¡No disminuyas el tiempo de calidad que le brindas a tu mascota! La llegada de un bebé podría absorber tu tiempo más de lo que crees, pregunta e investiga si tu pareja, algún familiar o amigo puede comenzar a convivir más con tu mascota para cuidarla o llevarla a pasear. También existen empresas que proporcionan estos servicios.

Con el nacimiento de tu bebé
- Si existe la posibilidad, antes de presentar físicamente a tu bebé frente a tu mascota, deja que la mascota olfateé alguna prenda o cobija de tu hija o hijo, esto es con el propósito de que identifique su olor.
- Si la opción anterior no es posible, en el momento en que entres a casa con tu bebé, estimula un ambiente de relajación; toma el tiempo necesario para saludar a tu mascota como habitualmente lo haces y con ayuda de alguien más que pueda sostener a tu mascota, sin miedo, temor o sobreprotección al bebé, preséntalos tranquila y lentamente. Observa la reacción de tu mascota. Si notas que no es buen momento, no fuerces la situación.
- Después de algunas horas o incluso días, continúa intentando o reforzando la presentación. ¡Ya sabes! Sin miedo, relajadamente y con seguridad.
- En caso de que tu mascota no se esté tomando bien la llegada de tu bebé, es necesario consultar a un profesional, que te ayude a entender el comportamiento de tu mascota y cómo mejorar la relación.
- Es importante que no dejes solo al bebé con la mascota, siempre quédate cerca y observa la situación.
El hecho de que tu bebé conviva con tu macota o mascotas tiene efectos positivos en su desarrollo, existen investigaciones que demuestran que los niños y niñas que viven con mascotas presentan menores niveles de estrés, depresión y ansiedad, así como un sistema inmunológico más fuerte.