Una vez que nace el bebé se pinza y corta el cordón umbilical, resultando un muñón del mismo; se despende entre 7 y 15 días después, dejando como única marca el ombligo.
¿Qué es el cordón umbilical?
Es el cordón que une al bebé a la placenta y a través de él se intercambian sustancias nutritivas y oxígeno. Mide aproximadamente 50 centímetros y contiene 2 arterias principales y una vena. Dado que los pulmones y el sistema digestivo del bebé aun no funcionan todo el intercambio de nutrientes, de excreciones y de gases se producen a través de la placenta. Los nutrientes y el oxígeno pasan de la sangre de la madre a la sangre del bebé y los desechos del bebé se mueven en sentido contrario.
Recomendaciones para el cuidado del cordón umbilical
Los recién nacidos son propensos a sufrir infecciones ya que su sistema inmune se encuentra inmaduro y están expuestos a microrganismos que pueden ser transmitidos por vía vaginal al momento del parto o por contacto físico tras el nacimiento.
El cordón umbilical representa un sitio de entrada para los microorganismos y puede provocar una infección como la onfalitis (infección de la herida umbilical) que rápidamente puede diseminarse al cuerpo del bebé produciendo una sepsis.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda la “cura seca” del cordón que consiste en mantenerlo limpio y seco, sin aplicar sustancias antisépticas; dejarlo sobresalir del pañal para no irritarlo y dejarlo expuesto al aire.

Los consejos para realizar la cura seca son:
- Lávate las manos con agua y jabón antibacterial antes de manipular el cordón.
- No es necesario cubrir el cordón con gasas o fajeros, pero si se aconseja colocar el pañal por debajo de este para evitar roces y humedad.
- Mantén la zona seca y limpia.
- Durante el baño, lava el cordón con agua y jabón neutro. Después asegúrate de secarlo perfectamente.
Los signos de una infección local en el muñón umbilical incluyen:
- Secreción amarillenta y mal oliente del muñón.
- Enrojecimiento, hinchazón o sensibilidad de la piel alrededor del muñón.
Recuerda consultar a tu médico tratante si tu bebé presenta alguno de estos síntomas, si no come bien, presenta fiebre de 38 °C o más, su tono muscular es deficiente o esta flácido.